Los bolsos de piel son mucho más que un accesorio: son una inversión en estilo, carácter y durabilidad. Y como todo lo valioso, merecen cuidados especiales, sobre todo en los meses de más sol, calor y humedad.
Desde Naiara Elgarresta, compartimos contigo nuestros consejos clave para proteger tus bolsos de piel en ambientes como la playa, zonas costeras o ciudades muy cálidas, sin renunciar a llevarlos contigo.
1. Evita la exposición directa y prolongada al sol
La piel es un material natural, y como tal, reacciona a los elementos. La exposición constante al sol puede alterar el color, resecarlos o hacer que pierdan su suavidad original.
Tip: Cuando no estés usando tu bolso, guárdalo en una zona de sombra o dentro de una bolsa de algodón transpirable. Si estás en la playa o en una terraza, colócalo bajo tu silla o dentro de una tote.
2. ¡Cuidado con la arena y la sal!
La arena y el salitre pueden rayar o resecar la superficie de la piel, especialmente si no se limpian correctamente. Evita colocar tu bolso directamente sobre la arena o superficies húmedas.
Tip: Llévalo por dentro de un tote grande si vas a la playa, y al llegar a casa, pásale un paño suave ligeramente humedecido con agua para eliminar restos invisibles de sal o polvo.
3. Hidrata la piel, como harías con la tuya
La piel necesita hidratación para conservar su flexibilidad y belleza. Un bolso seco es más propenso a agrietarse con el tiempo.
Tip: Una o dos veces al mes, aplica una pequeña cantidad de crema hidratante especial para cuero (incolora y suave) con movimientos circulares, usando un paño limpio. No utilices productos domésticos ni alcoholes.
4. Alterna el uso de tus bolsos
Aunque ames un bolso en particular (¡y te entendemos!), alternar su uso permite que se conserve mejor y descanse de la exposición diaria a calor, roce o peso.
Tip: Crea una pequeña rotación de bolsos de verano: uno para la playa, otro para ciudad y otro para eventos especiales. Así cada uno cumple su función sin sobreexponerse. Te recomendamos echar un vistazo a nuestra colección, ahí encontrarás un bolso perfecto para cada ocasión.
5. Almacénalo correctamente
Cuando no lo estés usando por varios días, guarda tu bolso una bolsa de tela. Nunca en plástico, ya que puede generar humedad.
Tip: Rellena el interior con papel de seda
para que no pierda su forma. Y si estás en un lugar muy húmedo, añade un saquito de algodón con arroz o bolsitas antihumedad.
Cuida lo que te acompaña
Un bolso bien cuidado puede durar años y acompañarte en muchos veranos. En Naiara Elgarresta diseñamos con materiales nobles, pensando en la durabilidad, la funcionalidad y el estilo atemporal.
Y recuerda: cuidar tus piezas también es una forma de vestir con conciencia.